El taller de los pequeños artistas se convirtió en una auténtica fiesta de colores.
Rodeados de estímulos, la espontaneidad y la emoción del descubrimiento inundó las paredes del taller.
Para empezar bien el día nos lanzamos a la alta repostería.
La arcilla es un material excelente para esta edad, ya que ofrece la oportunidad de manipular un material tridimensional que puede ser apretado, estirado o comprimido ejercitando así dedos y músculos en forma diferente.
Pero, no podremos llevar estos manjares por la calle, todos querrán probarlos!
Necesitamos hacerles una caja que las proteja, con su mantel y todo.
Después de una mañana de fogones no apetecía otra cosa que comerse un gran helado de cucurucho lleno de bolas de mil sabores..
..el de pistacho y el de plátano eran los mejores,
y amasar el barquillo con el rodillo, lo más divertido.
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