El pasado domingo, tuvimos la suerte de participar en la IV Foliada tradicional que se celebra en las Torres de Santa Cruz.
Un encuentro familiar en el que las tres "bes" , buena música, buena comida y buen baile, se unen para ejercer de anfitrionas en un día en el que compartir y disfrutar de la buena compañía constituyen el alma de la fiesta, todo un placer autóctono!
Nuestra misión consistía en aportar un espacio en el que los niños pudiesen además incorporar a este bonito recuerdo una experiencia de creación artística en plena naturaleza.
La combinación era perfecta, así que metimos todos los ingredientes en la coctelera y sacamos una pócima en la que, naturaleza, reciclaje y música tradicional compartían un tiempo de ocio y creatividad.
De primer plato, tambores. grandes tubos de cartón (gracias papá de Roi!), globos, una ramita y una graaan bola para aporrear sin compasión...un éxito!
Mientras secaban los tambores aprovechamos para hacer recolecta de elementos de la naturaleza.
Piedrecitas, hojas, ramas, frutos...todo valdría para transformarlos en auténticas obras de arte...
El postre corrió a cargo de las panderetas.
Unos trozos de cartón y unas cápsulas de café y...
solo había una cosa que podía mejorarlo,
un gran...
¡¡aturuxooooo!!
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